Esta historia lo refleja muy bien. No por tener más juguetes, los niños y niñas son más felices.
No hay que dedicar mucho tiempo, que los mayores tienen muchas obligaciones, pero, el que tengamos, dedicarlo intensa y sinceramente, demostrando cuánto queremos a nuestro/a hijo/a.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar